La unión entre Argelia e Irán en torno al Polisario puede suscitar todas las inquietudes securitarias en la región

Un hecho llamativo del alcance terrorista del Polisario es la "excesiva benevolencia" de la que goza por parte del régimen iraní, que pretende transmitirle las pericias de los combatientes de los Guardianes de la Revolución a través del canal del Hezbolá libanés, señala el politólogo en un análisis publicado en el sitio web Atlasinfo.

Según Tossa, en el tratamiento de la eliminación de Abu Walid Al Sahrawi, creador del grupo llamado "Estado Islámico en el Gran Sahara" y que hizo sus primeras armas terroristas con las milicias del Frente Polisario, ningún medio de comunicación dejó de mencionar la pertenencia de éste al movimiento separatista, una "milicia poderosamente armada por Argelia y que opera en un desierto donde abundan todo tipo de organizaciones terroristas que se dedican a todo tipo de actividades delictivas".

"Único patrocinador militar del Polisario, Argelia tiene una sólida experiencia en la infiltración, creación y manipulación de organizaciones terroristas y su ejército había demostrado un saber hacer y una pericia experiencia innegable en los oscuros años de la guerra civil argelina de los 90, cuando agentes argelinos se disfrazaban de barbudos armados para cometer todo tipo de atrocidades y aterrorizar al pueblo argelino", recordó.

Añadió que más tarde, cuando los GIA fueron desplazados hacia el sur para controlar una parte del Sahel, "sus vínculos con la institución militar argelina se mantuvieron a propósito, como demuestran las múltiples vacilaciones argelinas para participar eficazmente en la guerra internacional contra el terrorismo en esta región".

"El Polisario es, pues, una valiosa flecha en el arco militar argelino. En términos de agenda y de práctica, no tiene nada que envidiar a las famosas etiquetas del terrorismo internacional", dice Tossa, quien se pregunta si es realmente una coincidencia que el jefe de Daesh en África sea un miembro del Polisario.