La cuarentena obliga a un cambio en el consumo

Si la gestión de la crisis actual parece difícil, el después de la cris lo será más. Tras varias semanas de cuarentena, los ciudadanos experimentan otro modo de vivir, totalmente diferente de la de a la que están acostumbradas desde hace tiempo. “Se acabó con las tardes de compras para los unos y las vacaciones todo incluido en el extranjero para otros. También, se acabó con la compra de smartphone SUV. El consumidor marroquí está ante un cambio de brutal de comportamiento”, explica a TelQuel, Salima Jazi, responsable de la rama marketing y acción comercial en la Escuela nacional de comercio y gestión (ENCG) de Settat. “El instinto de supervivencia es el mismo en todas parte y a veces se impone a todos los otros valores”, indica la especialista. Para ella, “se podría observar tras la crisis, comportamientos de compra más racionales, responsables y concentrados en lo esencial”, añadió ella.

Lo que está claro es que algunas empresas como los restaurantes « podrían pasar al e-comercio y entrega a domicilio para suavizar los efectos de esta crisis” subraya ella a la vez que precisa que varios establecimientos ya se han adaptado a la situación desarrollando muy rápidamente sus servicios de entrega y nuevas soluciones de pago sin contacto o compra en “drive”.

Según Mohammed Qmichchou, profesor en el centro de investigación y de management, comercio en la universidad Ibn Tofail de Kenitra, este periodo de cuarentena podría ser uno de reflexión, introspección y autocrítica. Sobre todo con las pérdidas de ingresos de muchos empleados, profesiones liberales y artesanos, “la onda de choque económico podría ser más dolorosa”.

Karim Tazi, jefe de tiendas marroquíes de ropa Marwa, piensa, por su parte que después de la crisis, “una prioridad le será dada a la industria nacional”. Según él, Marruecos tiene que inspirarse de lo que hacen las regiones en cuarentena antes que él, como la región Wuhuan en China que hoy está llegando al final de la cuarentena.

Salima Jazi piensa, ella también que un gran paso se está dando en este momento respecto de la compra en línea. “un freno importante que impedía el desarrollo del e-comercio en Marruecos, es la falta de confianza. Pero ahora que el consumidor está obligado, tendrá que probar y volver a probar este canal de compra; y si la experiencia es positiva, puede adoptarse definitivamente, al menos para algunas categorías de productos o servicios”, indica ella. “aunque no estemos en las mismas proporciones de adopción que las observadas hoy, piensa que algunos comportamientos van probablemente perdurar en con el tiempo, insiste ella.