Un marroquí víctima de agresión racista en España

Houssam llegó a España como un menor no acompañado (MENA). Soñaba con volverse policía y trabajar duro para concretar su sueño tras vivir esa desventura. Tuvo una pelea con un guardia que opera en una cafetería. Pocas horas después del suceso, difundió un vídeo del altercado en las redes sociales.

Miembro del equipo de voluntarios de la Cruz Roja para prestar asistencia a los migrantes menores, Houssam tuvo el acceso al Bar Copity. “La mujer y otros agentes de seguridad me echaron al suelo y me dieron patadas”, explica en su denuncia que ha interpuesto con dos certificados médicos que dan muestran de sus lesiones. El marroquí también indica que fue esposado e inmovilizado por un agente que le escupió tratándole de “Moro de mierda”.